martes, 24 de febrero de 2009

Naranja

El naranja era su color favorito. Nunca se lo había dicho a ninguno de sus amigos. Siempre tenían mil temas de conversación: economía, deportes, ciencia, política... y con bastante nivel, pero nunca se había sentido con ánimo de hablar de esos otros temas aparentemente tan triviales. No quería que le tomaran como alguien diferente, ajeno al grupo.

Después del accidente lo había pasado muy mal y, casi sin darse cuenta, había ido echando a sus amigos de su lado. Después de muchos meses de soledad por fin se había abierto de nuevo y comenzó a apreciar a sus nuevos compañeros. Y ahora no soportaría perderlos. Aunque eso significara renunciar a parte de sus necesidades. O no expresar algo que hervía en su fuero interno.

De momento aguantaría. Ya soñaría. Ya encontraría alguien con quien compartir paisajes, colores, cómics... Seguramente pronto llegaría otra persona que hubiera quedado ciega después de un accidente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jo que penita!!!