sábado, 30 de agosto de 2008

¿Premio?

La comida olía de maravilla. Y en cuanto terminara se tomaría un yogur. Levantó la tapa y no había premio. Sólo un zurullo insolente atravesado en la taza.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No quiero yoghourt de premiooooo!!!!