viernes, 25 de julio de 2008

Monstruos

¿Por qué siempre se escondían los monstruos en un armario dejando la puerta entreabierta? Era terrorífico, sentía cómo acechaban tras la delgada puerta de madera, respirando silenciosamente y exhalando un fétido aliento a carne de niño podrida entre los dientes. Era mentira eso de que se escondían debajo de la cama; siempre lo hacían en los armarios. Y se dejaban la puerta entreabierta. Así podían salir en cuanto se durmiera y bajara la guardia. Y nada chirriaría y su padre no vendría a salvarle. Al menos, mientras estuviese totalmente cubierto por las sábanas de su cama no podrían hacerle nada. Pablo miró una vez más al armario en penumbra. No se movía la puerta. Miro fijamente unos segundos más y se cubrió del todo para intentar dormir.

Gonoth, sentado sobre las camisetas, se preguntaba en esos momentos por qué su señor Lucifer lo había creado con claustrofobia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Brrrrrrr..... jajajajajajajajaja